Crisantemos con un toque sostenible
La sosteniblidad es un concepto muy amplio. Se trata de energía, del modo de tratar a las personas, de disminuir la huella de carbono y de mucho más. Para Dekker Chrysanten la sostenibilidad significa sobre todo trabajar por un mundo mejor.
Sostenibilidad
El clima ideal, también para el medio ambiente
En Hensbroek usamos plantas de cogeneración y, gracias a ello, generamos nosotros mismos la mayor parte de nuestra necesidades energéticas. Las pantallas climáticas retienen el calor en el interior y las instalaciones y sistemas de climatización se han seleccionado teniendo en cuenta su consumo energético mínimo y una mayor vida útil. Además llevamos años produciendo en un país donde el clima es ideal para el cultivo de esquejes de crisantemo: a saber, Tanzania. Aquí podemos cultivar con un consumo energético mínimo.
Menor uso de medios
La gestión integrada del cultivo (IPM) es actualmente el método estándar. La atención se centra en el uso del control biológico. Los productos químicos correctores solo se utilizan además de los insectos beneficiosos, cuando ella sea realmente necesario. Este enfoque ha permitido reducir considerablemente el uso de productos químicos en el cultivo de crisantemos. Dekker Chrysanten también opta por utilizar medios que no contengan neonicotinoides, es decir que no sean nocivos para las abejas.
Y Dekker Chrysanten opina que el uso de productos químicos en el cultivo ornamental se puede reducir aún más. Una variedad que tenga cualidades naturales contra las plagas y enfermedades necesitará menos ayuda para permanecer sana. Las tecnologías de ADN permiten que nuestros mejoradores ya seleccionen variedades al principio del trayecto según tengan propiedades de resistencia a las plagas y enfermedades.
Compromiso social
Los empleados que trabajan en Dekker Chrysanten saben que pueden contar con un empleo con perspectiva. Tienen la oportunidad de desarrollarse, ya que las personas reciben la responsabilidad y toda la ayuda necesaria para cursar estudios y formación. De este modo no solo se desarrollan a nivel personal, sino que también contribuyen al desarrollo de Dekker Chrysanten como empresa.
También queremos que la empresa tenga un valor añadido en los entornos en los que trabaja. Gracias a nuestras sedes internacionales, en Tanzania y Colombia, tenemos la oportunidad de representar mucho más para los entornos en los que estamos presentes. Nuestros empleados en el centro de producción pueden estar seguros de que reciben un tratamiento justo. Les pagamos un buen salario, nos encargamos de que las condiciones laborales sean seguras y les ofrecemos una oportunidad de transformar sus ambiciones en una carrera social. Las escuelas de los alrededores de nuestro centro de producción reciben apoyo a modo de materiales. Gracias a nuestra presencia in situ, la economía local sigue floreciendo.
Condiciones laborales
Las condiciones laborales de todos los lugares en los que trabajan nuestros empleados son buenas y seguras. La automatización y la mecanización ya ha hecho que mucho trabajo físico sea innecesario en el cultivo ornamental. Allí donde sea posible nos complace tomar más medidas para que el trabajo sea más agradable y suponga un mayor reto.
Comercio justo
En calidad de empresa familiar nuestro objetivo no es el beneficio a corto plazo, sino la continuidad de cara a las siguientes generaciones. Por eso queremos ser un socio comercial interesante para nuestros clientes. Un aspecto central de nuestro enfoque comercial es que también queremos que otros se beneficien. Cumplir lo acordado y reconocer las cualidades del otro y aprovecharlas para poder dar el siguiente paso juntos.